
El 19 de noviembre de 2022 pasará a la historia porque Bolivia jugó su partido número 500. Difícilmente se podía haber escogido un encuentro más desabrido para tal ocasión. En Arequipa se enfrentaron dos equipos eliminados del Mundial, nada menos que en la víspera de la inauguración del Mundial de Catar. Jugaron un partido intrascendente que poco honor le hace a la fecha señalada del medio millar de encuentros de la Verde.
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